
REVIEW: BLACKPINK – “THE ALBUM” (2020)
El primer full álbum de estudio de BLACKPINK desde su debut, el año 2016. Cuenta con ocho canciones, incluyendo los pre singles “How You Like That” y “Ice Cream” ft. Selena Gómez. “THE ALBUM” superó el millón de pre-órdenes.
No soy fan de ninguno de los pre-singles. “How You Like That” fue más de lo que ya conocíamos y “Ice Cream” me pareció demasiado facilista y genérico.
Sin embargo, creo que al escuchar el álbum completo, ambas canciones tienen sentido y no se me hacen malas. Claramente no son las mejores del álbum, pero no es descabellado que hayan sido una pequeña muestra de lo que se vendría.
Aquí haremos una revisión a las otras canciones, las inéditas y las que, realmente, le dan completa forma a lo que nos ofrece BLACKPINK en la actualidad. ¡Si quieres conocerlas, sigue bajando!

Pretty Savage
Esta canción pudo ser perfectamente el title track.
Al inicio podemos escuchar las voces y musicalización clásica del circo, incluso llega a ser medio siniestro. El bajo predominante le entrega una vibra poderosa, al igual que la construcción del pre coro. Es coqueta, sassy, empoderada, de hecho, es una canción a sus haters. Tiene la misma vibra que “DDU DU DDU DU”, “Kill This Love” y “How You Like That”. Estas tres son bastante similares musicalmente hablando pero con “Pretty Savage” es distinto, ya que sólo mantiene el estilo, pero es diametralmente diferente en su musicalización.
La incorporación de la escala egipcia en el puente y hacia el final, es un tremendo win.
Bet You Wanna
Me recuerda a Beyoncé en sus estribillos con “Love On Top”.
Es una canción de fácil digestión, muy apta al mercado occidental y radial hasta la médula. La colaboración de Cardi B fue sutil, y creo que quedó perfecta. Tiene una onda madura, muy de la década pasada. Rosé está increíble en este track, hacia el final se puede oír todo su potencial. Liviana, definitivamente es una de las ganadoras del trabajo.
Lovesick Girls
Su mejor title track desde “DDU DU DDU DU”, básicamente porque escuchamos un nuevo sonido de parte del grupo.
Finalmente se llevó a cabo una nueva búsqueda musical, y les funcionó perfecto, como siempre. El toque de la guitarra acústica en el inicio de la canción (¿han escuchado a Mumford & Sons?) y en los pre coros le entrega una nostalgia especial.
Es como esas canciones que son “felices” pero tienen un dejo importante de melancolía en su interpretación y letra, lo que también podemos escuchar en ese recurso del coro cantado por todas las integrantes, como una suerte de himno. La musicalización de esta sección me recuerda mucho a lo que hacía Avicii.
Otra cosa, las interpretaciones están soberbias y Rosé se robó la película completa. Lo único que no me convenció, fue el final, creo que pudo tener un término más resuelto, así como fue todo el track. Puedo apostar a que será un hit en radios y rankings.
Crazy Over You
La más débil de todo el álbum. Lo rescatable son los arreglos vocales del coro y las escalas árabes que acompañan toda la canción, que son las que hacen pegajoso el tema. Y lo otro, es que se utilizan instrumentos que salen de lo común -o al menos la reminiscencia de ellos- como la cuica brasileña o el geomungo, instrumento clásico del folclor coreano.
Más allá de eso, es un beat un tanto básico comparándolo con el resto del álbum. No hay nada muy memorable. Claramente, y mirando en retrospectiva, “Crazy Over You” pierde ante los otros tracks.
Update: es mi tercera escuchada y ya se me pegó, pero no quita mi opinión inicial.
Love To Hate Me

Con una vibra del hip hop clásico que se escuchaba a inicios de los años 2000, “Love To Hate Me”, tiene como particularidad la atención a las voces y a las armonías. Primera canción del disco en el que escuchamos un ensamble de cuerdas que, a pesar de hacer un trabajo relativamente sutil, transforman la canción, sobre todo cuando se detiene su sonido en el pre-coro. El recurso del minimalismo y los silencios están muy bien utilizados en este track.
Es de mis favoritas (si es que no mi favorita) de este álbum.
You Never Know
Es un statement terminar un álbum con algún track más lento y BLACKPINK no hizo la excepción. Una canción 100% melódica, acompañada siempre de un piano y de un ensamble de cuerdas que, a diferencia de la canción pasada, no son para nada sutiles. Es una balada popera, bien producida y, definitivamente, una buena forma de darle término a un álbum redondito.